SEMANA 10

SEMANA 10

Esta semana las colas caraqueñas por la cercanía del 24 de diciembre hizo más difícil sacar un tiempito para entrenar, además del tiempo que hay que invertir para las compras navideñas. Sin embargo temprano en las mañanas, el tráfico es ideal ya que hay pocos carros en las vías lo que permite ir al Parque del Este bien temprano a correr.

Un par de días en el parque con entrenamientos de unos 5k cada día fueron el preámbulo para mi mayor largo hasta ahora, el plan pedía hacer 29K y en realidad no quería hacerlos solo, por lo que cuadré con el pana José Luis Noronhac (@jlnoronhac) para hacerlos el 25 de diciembre, aunque no tan temprano para poder dormir un rato y decidimos arrancar alrededor de las 4pm para así  aprovechar un poco el clima ya cayendo la tarde.

En los primeros 10K no me sentía cómodo e inclusive pensé en pararme, pero ahí es donde entra en juego la importancia de entrenar los largos acompañado y por el hecho de ir con José Luis pues seguí y al final fue todo un éxito.

Hicimos una ruta que incluía gran parte de la ruta del maratón, por lo que pasamos por Los Próceres, la bajada de los stadiums, la Av. Rio de Janeiro, Macaracuay y la Av. Francisco de Miranda entre otros. Después de los primeros 10K donde como ya mencioné, no me sentía cómodo, agarramos un buen ritmo y la cosa cambió ya que me sentí muy bien y logramos llevar el entrenamiento con mucha soltura. Cuando íbamos pro el Km 21 se nos unió el pana Luis Terán (@luteran78) que necesitaba hacer unos 10K luego de dos semanas en el dique seco. Fue importantísima  la ayuda con la hidratación que nos facilitó Luis justo en el Km 22 ya que por ser 25 de diciembre, no había muchos sitios donde comprar agua y ya en ese tramo no tenía hidratación en el cinturón.

Hasta el kilómetro 27 pude llevar el ritmo de José Luis bastante bien, sin embargo desde ahí hasta el km30 fue muy duro el entrenamiento ya que si bien acusaba el cansancio normal de un entrenamiento largo, cardiovascularmente me sentía bien, es decir estaba cansado pero aun podía seguir corriendo; el problema del cansancio se me reflejaba fuertemente en las piernas, especialmente en la planta de los pies, donde el maltrato era realmente fuerte. Esos últimos 3k fueron los más difíciles sin lugar a dudas.

Al momento de terminar los 30k estábamos realmente extenuados pero con esa mezcla característica de cansancio con excitación que produce la actividad deportiva. A pesar de haber estirado al finalizar, por primera vez intentó darme un calambre en las pantorrillas aunque afortunadamente no se concretó, pero definitivamente el desgaste del cuerpo es impresionante; más aun tomando en cuenta que “apenas” son 30K y el día de la carrera aun faltarán 12k.

De todo corazón, muchas gracias a José Luis por animarse y animarme a correr un 25 de diciembre, cosa que a muchos le pareció una locura. Gracias también a Luis Terán ya que la compañía en esos últimos 10K más el agua que nos proporcionó fue esencial para lograr la distancia propuesta.

El próximo fin de semana toca hacer un largo aun mayor, pero tomando en cuenta que es 1ro de enero tal vez cambiemos ese largo por una distancia menor (unos 20K) pero tratando de bajar el tiempo. Como anécdota adicional debo decir que el uso de los geles nuevamente me generó cólicos desde el km20 por lo que están descartados para usarlos el 26 de febrero durante el maratón, las gomitas siguen siendo mis preferidas.

 Esto del running se pone cada día mejor, nos vemos en el asfalto…